La grandeza de Hey Jude está en la simpleza de su melodía y sus acordes. Una vez que la escuchas, te sorprendes pensando cómo es posible que nadie la hubiera compuesto antes. Y es que el que la escribió no la inventó: la descubrió. Tomó unas notas que sonaban bien, las modificó y las mejoró, creando así una canción fantástica. Y eso sólo puede hacerlo un genio.
Esta canción es para muchos la mejor de los Beatles, incluida también en las listas de las mejores composiciones de la historia. Y en su elenco de récords habría que incluir también el hecho de habernos aportado una de las mayores evidencias de la teoría PID.
Publicada el 26 de agosto en Estados Unidos y el 30 en Gran Bretaña, con Revolution como cara B. Fue el primer single producido y editado bajo el sello Apple y el que más éxito obtuvo. Número uno en Holanda, Irlanda, Bélgica, Alemania Occidental, Dinamarca, Singapur, Malasia, Nueva Zelanda, Noruega y Suecia, con ventas mundiales de más de cinco millones de copias a finales de 1968 y de siete millones y medio en octubre de 1972.
Una canción para Julian
Siempre se ha dicho que Hey Jude fue compuesta para Julian Lennon en consuelo por la separación de sus padres.
Esta es una de las veces en las que Faul habló sobre ello:
Comencé con la idea de “Hey Jules”, empezando con: “Julian, don’t make it bad, take a sad song and make it better”. Sabía que no iba a ser fácil para él. Siempre me sentí triste por los niños en los divorcios… Tuve la idea de la canción en ese tiempo y decidí hacerla. Lo cambié a “Jude” porque pensé que sonaba mejor.
Algo que también cuenta Peter Brown en su libro The love you make, de 1983:
Durante la separación de John y Cynthia Lennon, Paul fue a Weybridge en su Aston Martin para visitarla a ella y a Julian. Durante el camino hizo una canción para animar al chaval.
Y Cynthia Lennon, en su biografía:
Estaba totalmente sorprendida cuando una tarde, Paul llegó a nuestra casa. Estaba conmovida por su obvia preocupación por nuestro bienestar… En el camino hacia acá compuso “Hey Jude” en el auto. Nunca olvidaré el detalle de Paul de preocuparse en venir a vernos.
Una canción para animar a un niño por el divorcio de sus padres. Esa es la explicación oficial que siempre se dio. Pero Julian no se enteró de que esta canción era para él hasta veinticinco años después.
¿Cómo es posible? Si alguien compone una canción para animar a una persona y hacerle sentirse mejor lo lógico es cantársela, lo lógico es decirle que está dedicada a él para sacarle una sonrisa con su letra. Pero Faul no lo hizo. Faul jamás cantó la canción para Julian y ni él, ni mucho menos John, tuvieron a bien decirle nunca lo que significaba. Y eso a pesar de la estrecha relación que se supone que mantenía el niño con “su tío Paul”.
La palabra Jude
La letra habría empezado siendo “Hey Jules” para acabar diciendo “Jude”. Las explicaciones de Faul para este cambio de nombre -en unas ocasiones dice que era más fácil de pronunciar y en otras que sonaba “más country y western”- son las más ridículas dadas jamás para justificar una canción.
La palabra Jude significa “judío” en alemán y, a raíz de la Segunda Guerra Mundial, su uso se extendió a otros países, la mayoría de las veces con una connotación despectiva. Y no sólo nosotros nos hemos dado cuenta, sino que hubo más gente en su momento que levantó un gran revuelo por ello:
Para ayudar a publicitar la edición de “Hey Jude”, Paul decidió aprovechar la tienda cerrada de las calles Baker y Paddington. Una noche, a altas horas, se introdujo en la tienda y pintó las ventanas de blanco. Luego escribió HEY JUDE en grandes letras.
A la mañana siguiente los comerciantes de la vecindad se pusieron furiosos; al no haber oído hablar nunca de la canción “Hey Juden” (Juden significa “judíos” en alemán), lo tomaron como una injuria antisemita. Un ladrillo rompió el escaparate antes de que pudiera borrarse la inscripción y aclararse el malentendido.
The Love You Make. Peter Brown / Steven Gaines (1983).
Durante la filmación del vídeo promocional el set de grabaciones se llenó de policías encubiertos, mientras las calles cercanas y el espacio aéreo se cerraban por unas horas. A las puertas del estudio se encontraba la guardia civil armada. Todo ello debido a que los Beatles tenían miedo de que se pudiera producir un atentado contra ellos por las varias amenazas de muerte que Faul había recibido, al estar convencidos muchos de que la canción hacía referencia a los judíos.
Es decir: sufren un ataque contra la tienda de Apple a raíz de escribir el título de la canción en sus ventanas, se ven obligados a rodearse de policías armados para protegerse de un posible atentado, ¿y no se modifica el nombre? ¿Sonaba tan espantosamente mal “Jules” que era preferible arriesgar incluso la vida por publicar así la canción?
Brian Epstein, como todos sabemos, era judío. Y, como ya apunté en mi primer artículo sobre John, este tenía por costumbre llamarle así, en una de sus bromas ácidas, propias de su estilo, que Epstein no se tomaba a mal porque lo conocía bien.
La versión de John
McCartney y Lennon acabaron de componer la canción en casa de Paul, el 26 de julio de 1968.
The Long And Winding Road · A History Of The Beatles On Record. Neville Stannard (1984)
Es interesante que se diga que John y Faul la terminaron de componer juntos, y que tanto Cyn como él avalaran durante años la historia oficial de que había sido escrita para Julian, cuando tenemos a John declarando esto:
Bien, cuando Paul me cantó por primera vez Hey Jude, o me puso la pequeña cinta que él había hecho con ella, me lo tomé de forma muy personal. “Ah, soy yo”, dije, “soy yo”. Y él dijo: “No, soy yo”.
John Lennon, 1968.
En primer lugar, cantar a alguien una canción y ponerle una cinta son cosas muy diferentes. Y dada la importancia de la canción y del momento, John debería recordarlo y no dar dos versiones dispares. Posteriormente Faul avalaría la versión de la maqueta, como veremos más adelante.
Pero lo importante aquí es eso que, según John, supuestamente le respondió Faul: “Soy yo”.
¿En qué quedamos? ¿Era para Julian o era para él?
Esa es su mejor canción. Empezó como una canción sobre mi hijo Julian porque Paul estaba yendo a verle. Entonces la cambió a “Hey Jude”. Siempre pensé que era sobre mí y sobre Yoko, pero él dijo que era sobre él y lo suyo.
John Lennon, 1972.
John insiste sobre el mismo punto en otra entrevista. Y, debido a ello, los periodistas le siguieron preguntando por ello, obligándole a explicarse:
Paul es muy buen letrista que cree que no lo es. “Hey Jude” es una letra muy buena, y yo no contribuí a ella. Hay un par de versos que indican que es un buen letrista, aunque no acabó de redondearla.
Entrevista para Playboy, 1980.
¿Era su mejor canción o sólo dos de los versos eran propios de un buen letrista? ¿Era su mejor canción o “no acabó de redondearla”? Más contradicciones.
Él dijo que había sido escrita para Julian. Sabía que yo, en ese momento, estaba separándome de Cyn y dejando a Julian. Él iba conduciendo para ver a Julian y saludarle. Siempre había sido algo así como un tío para él. Y se le ocurrió “Hey Jude”. Pero yo siempre la oí como una canción para mí. Ahora estoy sonando como uno de aquellos fans leyendo mensajes ocultos… Pero piensa sobre ello: Yoko acababa de aparecer en escena. Él está diciendo: “Hey Jude – Hey John”. Inconscientemente, él estaba diciendo: “Sigue adelante, déjame”. En un nivel consciente, él no quería que siguiera. El ángel que había en él estaba diciendo: “Te bendigo”. Al demonio dentro de él no le gustaba en absoluto, porque él no quería perder a su compañero.
John Lennon, 1980.
Impresionantes declaraciones, que no deberían sorprendernos, dado que fueron dichas en una de sus últimas entrevistas, en un momento en el que sabemos que, paulatinamente, empezaba a cansarse del juego y cargaba cada vez más sus palabras con dobles sentidos.
“Ahora estoy sonando como uno de aquellos fans (ya no dice “freaks”) que leen mensajes ocultos”.
Interesante dicotomía entre el ángel y el demonio que a la vez era Faul. Y más interesante aún que John esté diciendo, claramente, que detrás de Hey Jude hay algo más.
Otras interpretaciones
No sólo John parecía leer “otro mensaje” en la canción. Ha habido más personas que han dudado de la versión oficial de la misma, como es el caso de Judith Simons, periodista del Daily Express, que también consideraba que trataba sobre algo interno del grupo, o el crítico Mark Herstgaard, que dijo:
Mucha de la letra de la canción parece tratar más sobre un hombre adulto al borde de un poderoso nuevo amor, especialmente las frases “ya la has encontrado, ahora ve y cógela” y “estás esperando para actuar con alguien”.
Hubo otros que creyeron ver en la letra una supuesta alusión a la relación con Jane Asher que, a pesar de que finalizó oficialmente en 1969, ya iría mal desde hacía tiempo.
Pero el también crítico Tim Riley fue mucho más allá, mostrando una impresionante capacidad para leer los sentimientos que hay ocultos en Hey Jude y que, dando totalmente en el clavo, expuso:
La canción es sobre valorarse y consolarse de cara a las penurias, la interpretación vocal expresa mucho de eso. Comienza cantando para consolar a otra persona, encontrándose sopesando sus propios sentimientos en el proceso y, finalmente, en los estribillos repite su propia aprobación, llegando a creer en sí mismo.
Las letras subastadas
Tratándose de una canción tan importante en la historia de la música, el documento en el que se escribió supone un auténtico tesoro. Por supuesto, existe constancia “oficial” de dicho manuscrito y varias versiones sobre él.
En primer lugar, en algunas fuentes hallamos la afirmación de que en 1996 Julian fue a una subasta en Sotheby’s y adquirió un lote de objetos y fotos que habrían pertenecido a su padre. Entre ellos estaría el manuscrito original donde se compuso Hey Jude. Se gastó más de 60.000 libras, una cantidad importante, en comprar material de John. En concreto, el lote inicial le costó 35.000 libras y sólo el papel unas 25.000.
Para justificarse, Julian escribió en el catálogo original de la subasta:
Es muy extraño pensar que alguien ha escrito una canción sobre ti. Eso sigue conmoviéndome.
Preguntado también por ello, su mánager, John Cousins, declaró:
Tiene un par de fotos de su padre, pero no las suficientes. Las está compilando por razones personales y son reliquias familiares.
Es decir, que el objetivo de Julian era hacer acopio de todo tipo de material relacionado con su padre, pero llegándose a gastar casi la misma cantidad en la letra de Hey Jude, escrita oficialmente por Faul, que en el resto del lote.
Posteriormente, se dijo que en realidad lo que había adquirido Julian no era el manuscrito original de la letra, sino las notas de grabación, algo así como los bocetos de cómo iría montada la canción, con las anotaciones instrumentales.
Sin embargo, en una subasta posterior se mostró el siguiente documento:
Que es una nota de grabación. En esta, vemos la letra de Faul.
En abril de 2002, el francés Forrent Tessier acudió a la casa de subastas Christie’s mostrando un papel que, según afirmó, había comprado en el mercado de Portobello, situado en Notting Hill, a principios de los años setenta. Lo había estado guardando en su casa durante años, pensando que era falso, hasta que en 1996 lo había llevado a la casa de subastas Sotheby’s, donde lo habían analizado llegando a la conclusión de que era auténtico.
Estamos hablando del mismo año y la misma casa de subastas donde Julian había adquirido la nota de grabación. Sin embargo, Sotheby’s no lo adquirió, sino que Tessier, a pesar de su inmenso valor, decidió quedárselo hasta que se puso en contacto con Christie’s para “confiársela” (en ningún momento se dice que la vendiera). Una vez allí, decidieron sacarla a subasta con un precio de salida de 80.000 libras. Dicho evento se celebraría el día 30 de abril.
Inmediatamente, Faul se puso en contacto con ellos para impedirlo y exigió que se le devolviera, reclamando que le pertenecía legalmente. La casa de subastas se negó, por lo que Faul acudió al Tribunal Superior de Londres para iniciar una demanda contra ellos.
Su abogado, entre otras razones, expuso que el manuscrito tenía un gran valor sentimental para su cliente, puesto que había sido escrito para animar al pequeño Julian en un mal momento. Indicó también que a Faul le había sido robado dicho documento de su casa años antes, aunque no aclaraban las circunstancias de dicha sustracción, divagando con distintas posibilidades, como que lo hubiera cogido alguien que trabajaba en la casa o que se hubiera producido durante una oleada de robos que habría sufrido por aquella época (de lo que, por cierto, no existe reporte oficial ninguno, lo cual recuerda sospechosamente a la historia de Tony Barrow sobre el robo de la cinta de Candlestick Park).
Richard Morgan, representante legal de Christie’s, alegó por su parte:
El demandante escribiría la canción, pero no ha sido capaz de presentar aquí una sola evidencia de que jamás le haya pertenecido el papel en el que esta fue escrita.
Y no lo dejó ahí, sino que también cuestionó por qué “McCartney” jamás había dado parte del robo del manuscrito, si tanto valor sentimental tenía para él.
Pero de nada le sirvió. El día 29 de abril, en el último minuto, el juez falló a favor de Faul, obligando a Christie’s a sacar el papel del lote que habría de subastarse al día siguiente y mantenerlo en custodia hasta que se aclarase el asunto. Faul se conformó. A pesar del “inmenso valor sentimental” que tenía la letra para él, lo que en realidad había perseguido desde el principio era impedir que fuera vendida. ¿Por qué?
He buscado información de cómo quedó el litigio, si Christie’s todavía mantiene el documento en su poder o si finalmente fue devuelto a Faul. No hay nada.
Si buscamos en la red no nos será difícil encontrar un documento que dice ser el original con la letra. Pero lo curioso es que no es sólo uno. Hay al menos dos, eso sumado a las notas de grabación que se llevó Julian, y la otra nota de grabación que hemos mostrado. ¿Cuántos manuscritos de Hey Jude existen?
Por la descripción que se hizo en el juicio, este sería el más susceptible de ser el que Faul habría impedido que fuera subastado en Christie’s, ya que se dice que aquel tenía sólo 19 líneas y le faltaban los últimos versos de la canción.
Sin embargo, es curioso que, siendo que el juez había ordenado que el papel fuera guardado y custodiado por la casa de subastas porque aún no estaba claro quién era el dueño, esta se dedicara a fotografiarla y permitir que su imagen fuera difundida, siendo que no tenía permisos legales para ello. Y es que la noticia de que la letra original de Hey Jude había sido encontrada había corrido como la pólvora. Los fans querían verla, y había que enseñarles algo.
Pero, sorprendentemente, buscando en la red encontré esto otro:
Se trata de otro manuscrito con la letra, diferente al anterior. Pero es sin duda de la letra de Faul.
En esta ocasión, si os fijáis, en la última línea hay una frase muy curiosa, que no estaría incluida en la versión definitiva, y que dice: “Blow down to the plasticine banana”, “agáchate ante el plátano de plastilina”. ¿De dónde sale semejante frase? ¿Es eso lo que Faul pensaba cantarle a Julian para consolarle? Es bizarro y si me apuráis, hasta obsceno. Si buscáis en jerga inglesa, este tipo de expresiones se solían utilizar en alusión a los hombres homosexuales.
En cualquier caso, tenemos ya dos manuscritos supuestamente originales de Hey Jude. Uno tenía un “gran valor sentimental” para Faul. ¿Este no? ¿De dónde ha salido?
Una de las cosas que llama la atención es que ambos están escritos de una forma muy limpia, con caligrafía casi impecable, sin cambios o sobre escrituras, colocando incluso una línea bien hecha entre las estrofas; muy diferente a otros documentos similares:
Hold me tight, de Paul, escrita en 1961. De la diferencia en la letra no cabe ahora comentar, sino que lo interesante es ver la poca pulcritud que presenta el documento.
A day in the life, escrita por John. Llena de tachones, con diferencias en la grafía fruto de la rapidez al escribir, algunas líneas torcidas y partes añadidas posteriormente.
Otra copia de la letra de la canción, esta vez en mayúsculas. Encontramos lo mismo.
Day Tripper, también de John. Muy mala caligrafía, trozos escritos con otra tinta, posiblemente en días distintos.
Es lógico. Una canción no se escribe de una vez, no sale de la nada; puede surgir la idea, pero luego hay que cuadrar la letra y la música, arreglar posibles errores, mejorar el resultado paulatinamente. En los manuscritos de Faul no encontramos nada de esto, da la sensación de que haya sido escrita de un tirón, copiada directamente de otro sitio, pero cuando la letra aún no estaba completa, a juzgar por estas declaraciones de Faul:
Recuerdo que se la puse a John y a Yoko y les decía: “No pondré estas palabras en la versión definitiva”. Un verso era “the movement you need is on your shoulder” (el movimiento que necesitas está en tu hombro) y John dijo: “¡Es estupendo!” y yo dije: “Es absurdo, no tiene ningún sentido” y él contestó: “Claro que sí, es estupendo”. Por cierto, siempre soy así, nunca estoy seguro de si es suficientemente bueno. Soy así, ¿sabes?
Rolling Stone, 31 de enero de 1974.
¿Dónde está esa frase en los manuscritos? No aparece. Según John y él, Faul le había mostrado la canción a John en una cinta, prácticamente ya acabada, y fue entonces cuando le comentó lo de la frase. ¿Dónde está esa frase en los documentos donde Faul estaba escribiendo la letra? No está, y debería haber estado, pues supuestamente se le había ocurrido desde el principio. Estamos hablando de un boceto, de un papel donde se van anotando las ideas que surgen para la canción, igual que en este ejemplo:
While my guitar gently weeps. Esta ya tuvimos oportunidad de verla en el artículo sobre George. La frase que finalmente no pudo cantar, la de “veo la obra que estáis representando”, está ahí, porque se le había ocurrido mientras la componía, aunque luego la eliminara.
Por otra parte, y esto es lo más importante: ¿dónde pone “JULES”? Ese nombre no está en ninguno de los documentos, ni en las dos letras ni en la nota de grabación. En todos pone JUDE, a pesar de que en un principio la canción, según Faul, se llamó así.
Esta canción jamás se llamó “Hey Jules”. No hay absolutamente ninguna prueba de ello.
De nuevo, y al igual que con Lucy in the Sky with Diamonds, tenemos a Julian como excusa. Pero, en esta ocasión, no se pretendía ocultar sólo su significado, sino también su autoría.
La letra
Leamos entonces la letra desde otro prisma y recordemos las declaraciones de Tim Riley sobre ella:
Oye Jude, no lo eches a perder
Toma una triste canción y mejórala
El tema principal de la canción, “mejorar algo”, recuerda al concepto de “it’s not too bad” (no es tan malo), que aparece en Strawberry fields, cuyo título inicial iba a ser precisamente ese.
No olvides dejarla que llegue a tu corazón
Tan solo así puedes comenzar a mejorarla
Oye Jude, no temas
Te crearon para salir y hacerla tuya.
Llevar a los Beatles al estrellato. Tratando quizás de quitarle a Brian culpa por todo lo que pasó.
En el momento en que la sientas que corre bajo tu piel
Luego así comienzas a mejorarla
Y cada vez que te sientas dolido, oye Jude, detente
No cargues con el mundo en tus hombros
Esta parte de la canción recuerda mucho a Weight of the World de Ringo, en la que se repite incansablemente el concepto de estar cargando el peso del mundo sobre su espalda y querer liberarse de él de una vez por todas.
Bien sabes, que es un tonto quien no se deja emocionar
Haciendo así su mundo un poco más frío.
Fool en la original…
Oye Jude, no me decepciones
La has encontrado, ahora ve y tómala
Recuerda dejarla entrar en tu corazón
Solo así puedes comenzar a mejorarla
Así, déjala ir y déjala entrar, oye Jude, empieza
Estas esperando a alguien con quien interpretar
Perform en la original, hablando de realizar actuaciones…
¿Y no sabes que ese alguien eres tú? Oye Jude, lo harás
El movimiento que necesitas está en tus hombros.
Oye Jude, no lo eches a perder
Toma una triste canción y mejórala
No olvides dejarla que llegue a tu corazón
Tan solo así puedes comenzar a mejorarla,
Mejorarla, mejorarla, mejorarla, mejorarla…
Na na na nananana, nannana, hey Jude…
En este punto vamos a recordar la canción de Terry Night, en la que decía: Hey Paul… Y entonces vemos una continuidad: Hey Brian, Hey Paul…
Como decía Riley, esta canción habla de consolar a alguien, para luego extender este sentimiento hacia sí mismo (de manera que la canción, tal y como decía John, iría dirigida a él) y sentirse mejor ante las circunstancias que le rodean. Pero si dudamos de que fuera Julian el destinatario de este consejo, ¿quién necesitaba darse ánimos a sí mismo? ¿Quién llamaba a Brian “judío”? ¿Quién le hacía bromas sobre su homosexualidad (frase que por motivos obvios se desestimó en la versión oficial)?
Pero siempre la oí como una canción dedicada a mí. Él dice: “Hey, Jude-Hey, John”.
La música
Ya hemos cuestionado el significado de la letra, su composición y los manuscritos que circulan por la red. Con esto ya sería suficiente como para dudar de la versión oficial. Pero, tratándose de una canción tan fundamental, se hacía imprescindible también, para llegar a una conclusión, analizar la música.
El primer dato interesante que encontramos es que, originalmente, la canción no llevaría un piano incluido. La idea llegó de John, el cual se encontraba imitando la guitarra de George en su piano para que sonaran igual. Al parecer, el sonido gustó a todos, y decidieron abocarse más en este y grabar el piano para que fuera introducido en la canción.
La historia oficial cuenta que, cuando Faul le presentó al grupo la composición, George tocaba con su guitarra las mismas notas que cantaba él, hasta que este le dijo que no quería que hiciera eso cada vez que cantara un verso, tal como John lo había hecho en el ensayo.
Recuerdo que, en “Hey Jude”, le dije a George que no tocara la guitarra. Él quería responder a los riffs después de las frases vocales, pero yo no pensé que fuera adecuado. Yo no lo veía así, y fue un poco difícil para mí tener que atreverme a decirle a George Harrison -que es uno de los grandes- que no tocara. Fue como un insulto. Pero así es como hacíamos muchas de nuestras cosas. La norma era que el autor de la canción decía cómo había que hacer el arreglo. Esto le puso furioso. Faul, 1985.
¿Tan furioso como en el documental Let it be en el que George le grita a Faul que tocará lo que él quiera que toque o no tocará nada si no lo desea?
Aquel estallido fue el primero que tuvo George, en 1969, y dejó sorprendidos y descompuestos tanto a Faul como a Ringo y John, a juzgar por sus expresiones. No me creo que ya en 1968, y siendo que George había contribuido poderosamente a la composición del piano, ya que había creado los acordes, Faul se atreviera a decirle que no tocara. Suena a una de esas mentiras de Faul cuando intenta reescribir la historia a su conveniencia.
Eso de que era “la norma” es absolutamente falso, puesto que sabemos que, durante toda la etapa Beatle con Paul, las canciones se creaban entre todos, aportando cada uno lo que consideraba mejor. Y, a pesar de todo, si habían llegado a un acuerdo, si era la “norma” según él, ¿por qué George habría de ponerse furioso? ¿Y por qué se preocupa tanto Faul de recalcarlo?
El caso es que tenemos a John componiendo el piano según acordes de George. Una auténtica patada a la autoría absoluta de Faul de esta canción.
Como curiosidad, y antes de meternos de lleno en los aspectos técnicos de la grabación, incluiré un vídeo muy interesante que muestra la actitud de John y Faul mientras ensayaban la canción, algo parecido a lo que veíamos en Let it be:
Como vemos, para ser una canción tan sentimental, seguimos sin verle a Faul demasiado interés ni seriedad a la hora de interpretarla. Y, como siempre, John burlándose de él y de su forma de cantar.
La grabación
Oficialmente, los instrumentos utilizados fueron los siguientes:
John Lennon: voces y armonías, guitarra rítmica (Gibson “Super Jumbo” J-200)
Faul: voces, bajo (Fender Bass VI), piano (C. Bechstein)
George Harrison: voces y armonías, guitarra principal (Sonic Blue Fender Stratocaster)
Ringo Starr: batería (Ludwig).
Atención a Faul tocando el Fender Bass VI, que es el bajo de seis cuerdas para diestros que, según nos confirmó George en el Anthology, solían utilizar en el estudio cuando John o él grababan una línea de bajo.
Los días 29 y 30 de julio de 1968 se grabaron las 23 tomas de una primera versión de la canción. Estas tomas sólo incluían batería, piano, voces y guitarras solista y acústica.
Sin embargo, esta primera versión se desestimó, y al día siguiente se grabaron otras 4 tomas en los estudios Trident de Londres.
Finalmente, el día 1 de agosto se sobre grabó la primera de ellas, incluyendo en esta ocasión el bajo y la orquesta.
Estamos hablando de 10 violines, 3 violas, 3 violonchelos, 2 contrabajos, 2 flautas, 2 clarinetes, 1 clarinete bajo, 1 fagot, 1 contrafagot, 4 trompetas, 2 trompas, 4 trombones y 1 percusionista. Según se indica, la idea era darle un toque tipo Eleanor Rigby a la canción.
Pero a nosotros a lo que nos ha recordado es a los arreglos que Phil Spector añadió a las cintas maestras de Let it be, a petición expresa de John, y que tantísimo desagradaron a Faul, hasta el punto de esgrimirlo como excusa para la separación de la banda.
El 4 de septiembre se grabó el vídeo promocional en los Twickenham Studios de Londres. En la página oficial que consultamos, se recalcaba que en él John y George aparecen tocando instrumentos diferentes de los que utilizaron durante la grabación. Y tanto, porque John está tocando la Epiphone Casino y no la Gibson, y George toca el bajo -el Fender Bass VI, por supuesto -. Sigue resultando interesante el hecho de que se diga que Faul tocó este bajo para diestros, siendo que tenía su adorado Jazz Bass y el Rickenbacker a su disposición, ambos para zurdos.
El vídeo promocional es, como su propio nombre indica (e igual que en Let it be), “una puesta en escena”, lo que debería verse. Tenemos a un Faul nervioso en algún momento, sobre todo al principio, y, si os fijáis, volviéndose hacia John durante algunos segundos, asintiendo con la cabeza.
¿Quién toca qué en la grabación final de Hey Jude? Faul tocó el piano, al igual que en Let it be, dado que en aquel momento era el instrumento que más dominaba, pero lo hizo sobre la composición de John, mientras George tocaba la guitarra solista. La línea de bajo, de acordes sencillos, y extremadamente parecidos a la primera versión de bajo de Let it be, fue compuesta y tocada por John, porque si nos fijamos en este cover:
Y lo comparamos con John tocando en The Long and winding road:
Y escuchamos este otro cover del bajo:
Vemos su similitud, tanto en los acordes como en la posición de los trastes en la que tocaba John.
En las primeras tomas John tocó la guitarra rítmica y sobre grabó la línea de bajo después.
Ahora voy a mostraros los siguientes vídeos:
El primero de ellos es de un usuario de Youtube, y supuso para nosotros la base en la que trabajamos posteriormente a la hora de realizar comparativas.
Los siguientes fueron hechos por nosotros, completando y detallando más la comparación:
El Fandanguillo de Almería, la evidencia definitiva
Todo comenzó cuando encontré, casi por casualidad, un estudio que parecía establecer una conexión entre Hey Jude y una canción popular española titulada El fandanguillo de Almería, compuesta en 1910.
Al momento me puse en alerta: como todos sabemos, John estuvo en Almería en 1966 grabando la película How I won the war.
Dada la importancia de este hallazgo, decidimos seguir investigando. Y es que el simple hecho de que John hubiera estado allí, aunque resultaba relevante, no era suficiente como para argumentar que hubiera escuchado esta composición.
El señor Federico Soria, autor del blog “Música, un mundo polisémico“, además de aportar una interesante comparativa de acordes que demuestran la gran similitud entre ambas melodías, comentaba haber oído que en los años sesenta, en una iglesia situada en el barrio de La Cañada, donde se alojó John en aquel tiempo, había un reloj que al dar la hora hacía sonar un fragmento del fandanguillo.
No sólo eso, sino que también hay constancia de que en el reloj del ayuntamiento también estuvieron sonando algunos compases de esta melodía durante décadas, al dar los cuartos y las horas, aunque en este caso sólo es seguro que lo hiciera a partir de los años ochenta. Sin embargo, en el artículo encontrado, se puede leer textualmente: “el 11 de agosto de 1981 el carrillón y el Fandanguillo de Almería vuelven a sonar en la Plaza Vieja”. Es decir, que, después de un tiempo -no determinado -se recuperaba esta tradición que comparten además muchos otros pueblos y ciudades españolas, en los que, desde hace muchos años, tienen por costumbre hacer sonar las canciones típicas del entorno en los relojes de sus iglesias. De hecho, el Fandanguillo es el himno popular de los almerienses.
Lo interesante es que la melodía del reloj del ayuntamiento fue adaptada por el prestigioso maestro de guitarra José Fernandez Sánchez, alias Richoly. Richoly, siguiendo instrucciones del alcalde, seleccionó y transcribió estas notas para que sonaran en el carrillón, supervisando todo el trabajo y dando instrucciones al relojero sobre qué sonoridad era la más adecuada.
Ringo Starr se hizo amigo de Richoly durante su estancia en Almería, ya que, al parecer, Ringo estaba muy interesado por la música española. Pasaron juntos una velada en la que el maestro tocó varias piezas. Días después lo contrató para amenizar el cumpleaños de John. Este mismo músico, además, hizo una versión en 1989 de la canción The Fool on the Hill, en su álbum “Trío para tres guitarras”. Un álbum en el que contrasta mucho esta canción al compararla con el resto de temas, más orientados a la música tradicional, el ballet y el folclore.
En un foro almeriense de música en el que analizaban la relación del fandanguillo con Hey Jude, contaban que el propio John solía comprar discos de la música tradicional española en la tienda de Sánchez de la Higuera.
En ese mismo foro un guitarrista que había realizado su propia comparativa de ambas melodías comentaba que, si bien el “camuflaje” del estilo fandanguero está muy bien hecho, este todavía deja entrever la influencia que el fandanguillo pudo haber tenido en la canción. Aseguraba, al igual que Federico Soria, que son muchas las notas coincidentes, pero muy bien desviadas y con mucho ingenio.
Es importante señalar que en ningún caso se acusa a John de plagio, sino que se alude a una posible inspiración, cuyas probabilidades han quedado ampliadas con los datos que hemos expuesto, y que ofrecen la práctica seguridad de que, de una forma u otra, John tuvo que escuchar el fandanguillo durante su estancia allí.
Tan seguros (y orgullosos, claro está) estaban los participantes de este foro, que decidieron tratar de volver a sacar a la luz el tema, y para ello se dirigieron a varios medios de comunicación, hablando finalmente con Adolfo Iglesias, jefe de la sección de cultura del diario La Voz de Almería, mismo periódico donde Federico Soria había expuesto su tesis años antes.
Sin embargo, para su desesperación, Iglesias expresó su poca convicción de que el tema tuviera interés. ¿Los motivos? Atención:
1. El hecho de que John Lennon y “Paul McCartney” no trabajaran ya juntos en aquel tiempo a la hora de componer sus obras.
2. Que “Paul McCartney” no hubiera estado nunca en Almería.
Por lo tanto, estos periodistas consideran poco probable, a pesar de las contundentes evidencias, que John Lennon se hubiera inspirado en el Fandanguillo para la composición de Hey Jude porque, obviamente, esta canción está atribuida a McCartney.
Y yo argumento lo siguiente: ¿qué es lo que no encaja aquí? La supuesta autoría de Faul en Hey Jude. Si eliminamos a “Paul McCartney” de la ecuación, y sumamos todo esto a lo ya expuesto a lo largo de todo este artículo, ¿qué probabilidades hay de que John Lennon se inspirase en el Fandanguillo? ¿Qué probabilidades hay de que John Lennon compusiera en realidad Hey Jude?
Pero no nos vamos a quedar aquí. Recientemente un seguidor y amigo nos puso en conocimiento, dada su experiencia musical en torno a la música Beatle, del tremendo parecido de Hey Jude con otra canción. Se trata de India, y fue compuesta, cómo no, por John Lennon.
Aunque la fecha de grabación está situada a principios de los setenta, su temática, su letra y el estilo del tema están indudablemente basados en su estancia en Rishikesh, la cual tuvo lugar a principios de 1968, unos meses antes de la grabación de Hey Jude. De hecho, la letra alude al tiempo presente:
India, India
Llévame a tu corazón
Revélame tus ancestrales misterios
Estoy buscando una respuesta, pero en algún lugar muy dentro de mí
Sé que no la encontraré aquí
Puesto que ésta se encuentra ya en mi mente.
Para ilustrar todo ello, hemos realizado un vídeo comparativo de las tres melodías:
Y con esto, creemos que ya no hay nada más que se pueda decir, salvo que, efectivamente, sólo un genio pudo componer esta canción.
http://www.lasprovincias.es/20120727/gente/paul-mccarthey-letra-olvido-201207271346.html
Lady Ruth, Radha Badtler, Paul McManus y Jaime Macarni (página Real Paul)
Quizas tu mejor articulo de analisis de canciones, Lady Ruth. Impresionante. Enhorabuena a ti y tus colaboradores. El conjunto de evidencias a favor de la autoria de John me parece imposible de rebatir.
Muchas gracias, Alberto. Como anécdota te contaré que la pista sobre el Fandanguillo de Almería surgió cuando el artículo ya llevaba un tiempo publicado en mi anterior perfil de Facebook. Por eso le he llamado “la evidencia definitiva”, puesto que, si con lo expuesto ya resultaba verosímil la teoría de John como compositor, esto terminó de confirmarlo hasta convertirlo en, como tú dices, irrebatible. Un abrazo.
Si es de Lennon por qué insisten entrevistarlas a Mcartney?
Tú has leído el artículo entero? Entiendes de qué trata este blog?
I hope you can read my English. You present a persuasive case, but why should John write a song initially directed towards Brian Epstein when Brian Epstein was already dead? The one song acknowledged to have been written by John Lennon about Brian Epstein after his death — entitled “Brian Epstein Blues” — is somewhat nonsensical and is hardly complimentary.
Hi, Mark. And why should we deduce that John wrote it after Brian’s death? Perhaps he started it some time before, even in Almería, or after his stay there. In fact it is logical because at that moment he would have the melody in his mind.
While the song definitely doesn’t appear to have been written for a young child agonizing over the separation of his parents (though Lennon’s parents themselves also separated when he was young), it doesn’t seem to have been written for a homosexual male adult either — “let her into your heart”; “let her under your skin”; “you were made to go out and get her”, etc.
Or are those segments — which suggest a straight man’s infatuation with a woman — the parts where the song becomes self-referential to John?
Other than these objections, I am impressed with what you have come up with. “El Fandanguillo de Almeria” definitely sounds like a source for “Hey Jude”, especially considering the time that John spent there.
Si la canción fuera de Lennon, por qué nunca lo dijo? ni siquiera canta la melodía, por qué deja que sea McCartney? no corresponde a la lógica con la que trabajaban los Beatles? te parece que le “regalaría” esta canción al supuesto falso Paul? no me cuadra.
Además en todas las entrevistas Lennon se encarga de confirmar lo qeu dice paul sobre el cómo y por qué de la letra
Hola Lay:
Como siempre, me dejas sin palabras. Es indudable la creatividad de cuatro jóvenes. Y es indudable también la conspiración que nos rodea todo el tiempo, ya sea en la música, en la política, la economía, o la alimentación. Cada artículo que leo de ti, no hace más que confirmar que en todo lo que vivimos siempre hay una intención. Estoy muy agradecida con toda tu investigación, y a tus colaboradores también. Es difícil ver la realidad, pero en este mundo no hay más. Yo también me rehusaba a aceptar la muerte de Paul; pero caí en cuenta de que no es el único ser que han sustituido; hemos sido engañados desde hace mucho tiempo. Recibe en mi nombre muchos saludos y abrazos desde México.
Si la composición no es de Macca, como se le decía regularmente a Macartney, por qué lLennon nunca lo reclamo como suya? Por qué McCartney hasta el sol de hoy es el que la canta en todos sus conciertos?
Otra cosa, macca, su vida artística no termina con la separación de los Beatles, sinó a seguido hasta el día de hoy, cantando, componiendo y creando otras bandas como THE Wings reafirmandolo como un verdadero icono musical y que para ser Paul no basta parecerse a el, sino poseer su talento. Me encanta sus comentarios.
Yo recuerdo que un día en clase de música en el instituto cogí una de las guitarras y acústicas y empecé a tocar la canción que me había aprendido el día anterior, que era “India” de John Lennon. Y en cuanto llegué a la parte de “I’m searching for an answer” Mi profesora comenzó a cantar Hey Jude, a lo que yo tuve que cambiar los acordes para tocar esa canción. Este hecho me hizo pensar en Lay.
En respuesta a Alberto (Claramente un fan de Faul) y Lali. Hay muchas canciones Beatles atribuidas a Faul, pues sino todos iban a notar que uno de los mejores compositores de la historia (que hasta componía canciones para otros artistas desde muy joven), se había quedado de repente sin talento, pues Faul carecía de talento. Y es lo que ocurrió cuando Faul creyéndose talentoso, se aventuró a escribir un álbum solista. “Llovieron voces” diciendo: ¿Dónde quedó el talento de este hombre? Seguramente, todo esto quedó acordado, y John y los muchachos mantuvieron su palabra (recordemos que ellos no podían saber que canciones serían hits, y seguramente dejaban al azar cuales dejaban para Faul, prefiriendo poner sus propios temas que dejar bodrios como obladí obladá en todos los álbumes). Por otra parte, la industria musical siempre estuvo presta a ayudar a Faul (como un muy fiel lacayo que ha sabido ser) por su silencio, y el seguir fielmente sus directrices, y cuando le vieron caer con su fracasado primer albúm, acudieron en su ayuda, plenos de difusión, y asistencia de músicos de apoyo (Como Denny Laine), quiénes co-componían los temas de su banda Wings… Vean los antecedentes con objetividad… y si tienen algo que objetar, díganlo.